lunes, 11 de mayo de 2015

LAS MODERNAS ADDICCIONES

Ponencia presentada el pasado sábado día 9 de mayo por Blai






Las modernas adicciones:


Aunque me imagino que todos los sabemos, creo que sería necesario para comenzar definir, lo que se conoce por el concepto adicción.

Según el RAE:
adicción.
(Del lat. addictĭo, -ōnis).
1. f. Hábito de quien se deja dominar por el uso de alguna o algunas drogas tóxicas, o por la afición desmedida a ciertos juegos.
2. f. desus. Asignación, entrega, adhesión.

Pero si buscamos un poco más, nos podremos encontrar con esta otra:
Se considera adicción ( palabra que en latín indicaba al deudor que, por falta de pago, era entregado como esclavo a su acreedor), cualquier actividad que una persona sea incapaz de controlar, que la lleve a conductas compulsivas y que perjudique sobre todo su calidad de vida (que genere problemas en su trabajo, en sus actividades académicas, en sus relaciones sociales y/o en sus relaciones familiares o de pareja):

Se trata de conductas impulsivas e irresistibles, el impulso incontrolable de llevar a cabo algo irracional o contrario a la voluntad de quien lo ejecuta. Es un padecimiento o síndrome que presenta un cuadro muy exuberante de signos y síntomas característicos, según la sustancia adictiva de que se trate. 



Desde hace siglos que se conocen sustancias que producen adicción, como los opiáceos, algunas setas, la hoja de coca o el cannabis.
Posteriormente en años más modernos comenzaron a sintetizarse los alcaloides de esas plantas, creando sustancias químicas mucho más adictivas, como la heroína o la cocaína.
También y no por menos razones, podríamos hablar aquí del alcoholismo y del tabaquismo.

La adicción a sustancias es un padecimiento crónico, recurrente, progresiva y en ocasiones mortal que se caracteriza por la búsqueda y el consumo compulsivo de drogas, a pesar de sus consecuencias nocivas. Se considera una enfermedad del cerebro porque las sustancias psicoactivas y las conductas compulsivas modifican la estructura y funcionamiento de ciertas áreas de este órgano.

Pero  el motivo de esta ponencia no son esas adicciones que ya han sido comentadas y discutidas en tertulias anteriores, sino las adicciones características de la época actual.

El actual sistema de vida ha hecho que aparecieran unas nuevas adicciones que no existían hace unos años, por el motivo que los agentes que las causan aun no estaban en la sociedad.
Generalmente son adicciones, en las que no hay uso de sustancias, pero, en el resto de síntomas y consecuencias, son exactamente iguales.



Podríamos poner por ejemplo la “ludopatía”. La adicción al juego se conoce desde hace años, solo hay que echarle un vistazo a la literatura, pero la aparición de las máquinas electrónicas, que permiten jugar en bares y otros lugares de ocio, ha hecho que el número de personas, enganchadas, haya aumentado considerablemente.

Pero aparte de la ludopatía, han emergido distintas “patias”, modernas, todas ellas son fruto de patrones de comportamiento de las sociedades desarrolladas que pueden convertirse en adicciones.

Podemos dividirlas en tres grandes grupos:

Relacionadas con el aspecto físico.
Relacionadas con las nuevas tecnologías.
Relacionadas con las relaciones interpersonales.




Dentro del primer grupo, podríamos decir que el deseo por tener "un cuerpo 10" puede llegar a convertirse en una verdadera adicción. Aunque los trastornos alimentarios, como la anorexia y la bulimia, son cada vez más frecuentes, hay otro tipo de conductas relacionadas con la alimentación que también son habituales.

1.Ortorexia

Este trastorno consiste en la necesidad de consumir sólo comida biológicamente pura y evitar todos los alimentos que puedan resultar tóxicos.
La nueva tendencia es comer sano pero de una manera obsesiva. Cuando esto ocurre se está frente a un trastorno al que los especialistas denominan ortorexia.



Quienes la padecen huyen de todo lo que consideran impuro, como los pesticidas, los transgénicos, los aditivos, los alimentos manipulados, e incluso, los congelados. Se convierten en fanáticos consumidores de alimentos de cultivo ecológico y probióticos. El problema radica en que estas personas centran su vida en la comida y la convierten en una especie de ritual que gobierna sus vidas. 



2. “Dieting”

Muy parecido al anterior, pero en este caso es el concentrarse en hacer dieta. En la actualidad, el control del peso es un tema prioritario, Casi el 50 por ciento  de la gente se pone a dieta cuando el verano está próximo y, la mayoría, sin ningún tipo de control médico.



Además hay publicaciones, sobretodo en internet que prometen productos maravillosos con efectos rapidísimos, que o bien son estafas o son peligrosos para la salud, (uno fue retirado porque contenía anfetaminas).

3. Vigorexia:

Las mujeres desean estar delgadas y los hombres, tener un aspecto atlético y musculoso. Esta aspiración puede llegar a convertirse en uno de los principales valores de la vida y en una obsesión por un cuerpo perfecto y musculoso:



A menudo, los afectados sufren baja autoestima y una distorsión de la imagen corporal.
Se dedican muchas horas al ejercicio físico y se pone especial atención en la alimentación, que suele ser hiperprotéica para fomentar el desarrollo de la masa muscular.



También es habitual el consumo de suplementos alimenticios y anabolizantes. De esta manera, el entrenamiento físico y la dieta se convierten en uno de los ejes de la propia vida.

Dentro del segundo grupo de las adicciones debidas a los avances tecnológicos, podríamos hablar de:

4. Adictos a Internet:

En España, un 85% de la población adulta navega por Internet y un 5% abusa o hace un mal uso de esta actividad. Los expertos explican que el indicador de un uso incorrecto, más que el número de horas que se pasan delante de la pantalla, podría ser el hecho de perder la noción del tiempo, sentir ansiedad al no conectarse o encender el ordenador a altas horas de la noche. 



El mal uso también puede manifestarse con síntomas físicos como cansancio, fatiga ocular, problemas musculares, inestabilidad emocional, confusión y sedentarismo. También pueden darse cambios en el comportamiento social, como disminución del grupo de amigos, conflictos familiares, escolares o laborales.
Los adictos a Internet sienten ansiedad si no revisan su correo electrónico, y sus redes sociales.



En un estudio reciente, mediante un escáner de cerebro realizado a 17 jóvenes adictos a Internet, se evidenciaron modificaciones cerebrales que podrían afectar a las emociones, la toma de decisiones y el autocontrol.
 El tema está lejos de resolverse, ya que también hay quien considera que esta supuesta adicción es un mito y solo es una nueva etapa del siglo XXI, donde los usuarios encuentran en Internet todo lo que necesitan.



5. Adictos al teléfono móvil:

De hecho es muy parecida al anterior, la adicción se manifiesta con los mismos síntomas, de angustia y ansiedad, si la persona se queda sin cobertura o sin batería y no puede mantener contacto.



6. Adictos a los videojuegos:

Pueden pasarse horas jugando con los videojuegos, y como en el caso anterior, si dejan de hacerlo, reaccionan con ansiedad, como cualquier adicto a la heroína.



De hecho las tres están interrelacionadas, ya que en la actualidad, internet, está en los teléfonos móviles y los videojuegos también para poder jugar “on line”

Relacionadas, con las relaciones interpersonales, podríamos hacer mención a:

7. Compra compulsiva:

Si de forma habitual se ocultan al entorno familiar las compras realizadas o hay sensación de haber adquirido de manera impulsiva un objeto que no es necesario, se puede estar ante esta adicción. 



Hasta un 30% de los españoles tienen problemas de autocontrol y un 5% podrían ser adictos a las compras, según los resultados de un informe promovido por la Unión Europea sobre los problemas psicológicos relacionados con el consumo. 



Este es un problema frecuente que afecta tanto a las mujeres, como a los hombres. La diferencia estriba en los productos que se adquieren, ya que mientras ellas optan por la ropa y las joyas, ellos prefieren la tecnología.

7 Adicción al sexo:

Con este concepto se define popularmente, lo que los médicos llaman Hipersexualidad,
El concepto de hipersexualidad sustituye los antiguos conceptos de «ninfomanía», (furor uterino) y de «satiriasis».
El umbral para lo que constituye la hipersexualidad está sujeto al debate, y los críticos preguntan si puede existir un umbral diagnóstico. El deseo sexual varía considerablemente en los humanos; lo que una persona consideraría deseo sexual normal podría entenderlo otra persona como excesivo e incluso otra como bajo.



La hipersexualidad es una de las dependencias menos conocidas y visibles, puesto que las personas que la padecen suelen mantenerla oculta y disimularla, sobre todo con las personas conocidas (con quienes se muestran incluso como tímidos). Se estima que hasta el 6 por ciento de la población lo padece, y que sólo el 2 por ciento de las personas afectadas son mujeres.



Si analizamos, lo dicho anteriormente, nos damos cuenta que todas son actividades que realizamos comúnmente, entonces, ¿dónde radica el problema?
A diferencia de los simples hábitos o de las influencias consumistas, las adicciones son «dependencias» que traen consigo graves consecuencias.
Estas consecuencias afectan negativamente la vida personal y social del individuo y su salud (física y mental), además de que limitan la capacidad de funcionar de manera efectiva.
Es adicta la persona que cree que no puede vivir sin el objeto de su adicción, por lo cual lo busca de forma permanente y compulsiva.
El adicto no controla su adicción, sino que vive en función de ésta: este es el eje y el condicionante de toda su rutina; si trata de salir repentinamente de esta rutina, se ve afectado por problemas de ansiedad y, por lo general, vuelve a caer en el consumo de su adicción, aunque puede dejar de ser adicto después de pasar por una fase llamada «mono», o “síndrome de abstinencia”, igual que en las adicciones a substancias.
A partir de aquí, el debate es ver si, analizándonos con sinceridad, padecemos o estamos en vías de padecer alguna de estas nuevas adicciones.
Y en caso afirmativo, buscar ayuda, igual que lo hacen los drogadictos o los alcohólicos.

Podéis dejar vuestros comentarios y opiniones en el recuadro inferior si así lo deseáis

1 comentario:

  1. Blai , es un tema superinteresante ya que en el mundo que nos rodea actualmente, cada día conocemos nueva adicciones y como tal siempre son negativas , cuando una adicción te domina a tí , es cuestión de abrir bien los ojos y poner remedio para no llegar tarde . Que pena que no pude asistir !!!!!!!!!!!

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