En primer lugar dar la bienvenida a tod@s, después del parón de las vacaciones.
De los temas presentados el primer día, se eligieron los siguientes:
"La
pérdida de la inocencia" ( A propuesta de Patricia )
"Nuestros políticos descuidan se coherencia ideoestetica" ( A propuesta de Teresa).
La pérdida de la inocencia:
A finals del passat agost,
diversos pobles de Catalunya s’han vist sorpresos per la visita massiva i
inesperada de unes colònies de Ciconia ciconia o cigonya blanca. La
cigonya de tota la vida, la que formava part d’una sopa de lletres mentidera en
la que suraven altres al llarg de la nostra infantesa: Reis Mags, Ratoncito
Pérez...
Diversos mitjans de comunicació han difós el curiós fet. En el grup,
ho comentem.
El mite de les cigonyes que porten nadons no és exclusiu de la infantesa
anterior a la democràcia, però sí és cert que la posterior ha rebut classes
reproducció humana i el National Geographic n’ha fet uns documentals preciosos.
Carl
Spitzweg. The Stork
La
cigüeña. Alemania. 1885
Museum
Sindícate
Si encara algú explica que els nens els porta la cigonya, s’haurà trobat
descobert, perquè aquestes nombroses colònies venien sense res al bec.
A mi m’agraden molt. Quan era petita vaig viure en un poble que tenia
diversos nius. Alguns d’alt del campanar de l’església. Marxaven, tornaven.
Cada any. Però va canviar la situació i jo vaig marxar a ciutat. Vaig deixar de
veure-les fins aquest final d’agost.
Com ha estat? Potser, l’augment de temperatura i altres condicions que han
canviat estan afavorint que en zones per on feia dècades que no passaven, ara
hi passin. Potser, a partir d’enguany les tindrem cada any, com les orenetes.
Les cigonyes a la tardor emigren del nord d’Europa al Sahel passant per la
península i Gibraltar. Això em recorda una altra migració en sentit contrari.
En una altra via es dirigeixen cap a Guyarat, terra de Gandhi i em fa pensar en
la pèrdua d’importància d’aquesta saga política. La tercera via passa pel
Bòsfor i Suez cap a Sud-àfrica on la pèrdua de la innocència ha fet concloure a
la majoria dels i les joves nascuts en democràcia que no cal votar.
Us deixo rumiant l’última frase.
El
web et permet seguir la migració d’aus que porten un xip de seguiment.
Qué político viste mejor?
¡Barack
Obama! Un diez. Por cómo viste, la calidad de las telas, cómo las lleva, cómo
se mueve... Sabe estar en toda situación, siempre armónico.
¿Cuál es el
truco?
Coherencia
entre tu aspecto y lo que dices. ¡Ah, y que la Casa Blanca tiene sastre propio para
hacer trajes a medida al presidente!
Más importa
que gobierne bien, ¿no?
¡Cuidado! La
buena gestión política incluye el aspecto y el atuendo: transmiten mensaje.
Todo
presidente representa a su pueblo: debe dejarlo en buen lugar... aun callado.
¿Qué político
le consterna por eso?
Mariano
Rajoy. ¡Confiesa que no le preocupa su vestuario! Yse nota. ¡No honra
debidamente su dignidad presidencial!
¿Tan mal
viste?
No se hace
los trajes a medida, son telas mediocres, a menudo la talla le va grande, los lleva
sin garbo, un poco encorvado..., y encima son italianos. Ir así a un encuentro
con Obama... ¡es hacernos quedar fatal!
¿Aboga usted
por el patriotismo textil?
Es un modo de
expresar el respaldo a la economía nacional. No todo es lenguaje verbal.
¿Política y
moda van de la mano?
La Pasionaria
vestía siempre de negro, no por negligencia o inercia, sino por presentarse como
correspondía, ¡según confesó ella misma!, “a alguien de mi condición”.
¿Qué
condición era esa?
La de una
persona que representa a la gente humilde. ¡Era consecuente, era coherente!
¿Hoy no lo
son nuestros políticos?
Ha habido una
crisis ideológica, y derechas e izquierdas se han mimetizado y se han
uniformado.
Visten igual:
¡uniformados!
Descríbame el
uniforme.
Traje oscuro,
camisa y corbata. “Todos son iguales”, dice la gente. ¡Pero si van de eso!
¿Sin matices?
No hay
mensaje vestimentario: imposible discernir izquierda y derecha por la
ropa.
Rajoy, visto:
critique a Rubalcaba.
En campaña le
aconsejaron usar vaqueros para parecer más cercano: sacó unos vaqueros anticuados...,
y se le notaba incómodo.
¿Qué político
patrio acierta al vestir?
Duran Lleida:
impoluto y coherente como conservador..., sabe jugar bien los complementos para
parecer más cercano.
¿Qué
complementos?
Combina
sabiamente colores de corbatas y de montura de gafas: el toque a la moda.
Artur Mas no
se quita ya las gafas.
Es un modo de
romper su imagen de hombre demasiado perfecto..., y hay un mensaje.
¿Cuál?
“Soy muy
responsable, estoy trabajando muchísimo, ¡ved cómo me dejo las pestañas!”.
Sutil.
Gallardón se
operó de la vista... pero conserva las gafas: dan imagen de solidez
intelectual.
¿Lo hizo bien
el Aznar presidente?
Pretendía
transmitir una imagen endiosada de hiperfortaleza, ¡y lo conseguía! Dejó el cargo
y se dulcificó: menos bigote, melena...
¿Qué tal
Alicia Sánchez-Camacho?
No es
aconsejable operarse en periodo de representatividad política. Y viste
demasiado ceñida: marca demasiado su anatomía.
¿Y Merkel?
Quiso un día
vestirse como una mujer normal, se excedió con el escote y le llovieron tantas críticas...,
que va siempre con traje sastre.
¿Qué consejo
le daría a un político para vestir idóneamente?
Cuatro buenos
trajes a medida, telas de calidad, cómodo, que aprenda a hacerse bien el nudo
de la corbata..., ¡el 90% la lleva mal!
¿Cómo hay que
llevar la corbata?
Recta, no
torcida. Y que no se vean botones.
También
puedes ir bien sin corbata...
El día en que
Zapatero anunció que no sería candidato, vistió tejanos, camisa blanca, americana
azul...: ¡era él de verdad, al fin!
La camisa blanca,
infalible.
Las hay
especiales: camisas blindadas. El Príncipe las usa. Tienen aspecto normal, pero
son antibalas. Las fabrican en Colombia.
Pero a veces
toca disfrazarse un poco.
“Vístete para
lo que quieres ser, no para lo que eres”, dijo alguien... Lo importante es ser
consciente del poder de la imagen.
Póngame algún
ejemplo de ese poder.
Yulia
Timoshenko: era una oscura empresaria de aspecto inquietante, rostro con
ojeras, pelo requemado y moreno... Decidió entrar en política... ¡y transformó
su imagen!
Hoy es una
cándida rubia, ¿no?
Rubia y con
una diadema campesina tradicional de pelo trenzado. Y vestidos claros: es
angelical, bondadosa, virginal... ¿Quién pensará que ha roto un plato? ¡Y así
gana!
¿Se puede
mandar y ser femenina?
Ségolène Royal es un buen modelo. Y Cristina Kirchner,
aunque es un poco... excesiva.
¿Y doña
Letizia?
Empezó
insegura, se retocó... y ahora se siente segura, se siente más reina.
¿Cuál es su
opinión acerca de que Fidel Castro pase de la guerrera al chándal?
Con tanta
personalidad, puede permitírselo todo... con los colores de la bandera cubana.
No es un
hábito muy dictatorial...
El dictador
gusta de uniformes militares, entorchados, bandas, gafas oscuras, bigote...
El Asad viste
a la occidental para engañar, juega a romper la coherencia ideoestética.
Incoherencia
ideoestética sería...
Acudirá una
manifestación sindical con bufanda Burberry: ¡Cándido Méndez! O ser del partido
ecologista Equo y no vestir sólo tejidos ecoéticos: les he preguntado al
respecto... y aún estoy esperando la respuesta.
Patrycia
Centeno, periodista
especializada en moda
Entrevista de
VÍCTOR-M. AMELA y R0SER VILALLONGA publicada en “La Vanguardia el 11 de
mayo de 2012”
Podéis dejar vuestros comentarios y opiniones en el recuadro inferior si así lo deseáis
No hay comentarios:
Publicar un comentario