DESCUIDADOS
Hablando con Paquita del tema de esta tertulia, intercambiamos un par de ideas. La
segunda, titulada Descuidados fue la elegida. ¿De qué va a tratar mi explicación con un
título así?.
Me voy a referir a esa sensación que tenemos a menudo de que estamos viviendo una
pérdida de educación en todo: en el transporte, en la conducción, en la calle, en las
obligaciones civiles. Se observa falta de empatía e incluso de instinto de supervivencia.
Acostumbrados a la formalidad durante la mayor parte de nuestra vida, este desastre nos sorprende y nos pilla descuidados.
El hilo conductor de los puntos que trataré sería mi generación, la del baby-boom o
boomers, hijos del desarrollismo que ahora empezamos a entrar en la jubilación. Diré ideas que compartimos, también quiero aportar recuerdos y que pasemos un buen rato.
En la primera parte voy a referirme a cuatro puntos básicos:
- la salud, en el sentido físico y mental
- la economía, doméstica y social
- la atención a mayores, enfermos y niños
- la sociedad envejecida de los países desarrollados
La salud, en el sentido físico y mental
En las últimas décadas hemos ido obteniendo cada vez más y mejor atención médica en la cobertura de la Seguridad Social. Os acordáis de cuando empezaron las operaciones y lostrasplantes de órganos? Al principio eran noticia de primera plana. Tras unos años se normalizó y después, España se convirtió en un centro de turismo sanitario y en uno de los principales proveedores de órganos. Paralelamente, se han generalizado problemas de salud mental como la ansiedad y la atención psicológica ya no se oculta. Ir al terapeuta es casi como ir al gimnasio. Todas las franjas del sistema educativo cuentan con psicopedagogas. Al igual que se ha extendido la práctica del deporte y del ejercicio físico en todas las edades.
Hemos avanzado en el conocimiento de nuestra salud. Nos tomamos la tensión, cuidamos la alimentación. Aunque se consuma mucho azúcar, también se hace dieta.
Aunque esta generación ha contribuido con creces al desarrollo y mantenimiento del
sistema, hace unos años que se la mira mal, se la acusa de acaparar una gran parte de la economía porque millones de personas van a cobrar pensiones. La sociedad en países desarrollados envejece y son mayoría. El descenso de la natalidad es general en estos países y lo es también el aumento de población inmigrada, sector en el que sí se produce el relevo generacional. En contrapartida, cuando la sala de espera del médico tiene en su mayoría personas de procedencia extranjera, también se pueden oír quejas. Los que se quejan lo quieren todo: que otras personas crearan lo que ahora disfrutan, pero que no envejezcan porque pierden capacidad productora y desarrollan necesidades que no están dispuestos a cubrir.
La economía, doméstica y social
Tanto para una persona como para la sociedad, la asistencia sanitaria mueve mucho dinero.
Seguro que al oír esto alguien ha pensado en los fraudes de las mascarillas, eh? Pero
quiero referirme al Medicamentazo. Bueno, ha habido varios. El primero que recuerdo fue en 1990, retiraron de la cobertura de los enfermos crónicos 200 medicamentos, muchos dermatológicos. Otro muy importante fue el de 2012, cuando la Seguridad Social dejó de financiar 417, cosa que significaba un ahorro anual para ellos y un gasto para nosotros de más de 450 millones de euros por año. A una buena parte de la sociedad le sacudió el bolsillo. Pero había tanto de bueno aún en el sistema, aunque muchos se quejasen de las listas de espera!!! Ahora los boomers estamos aumentando el consumo de medicinas y de atención médica, ya se sabe, aumentan los achaques.
Otro aspecto que consume buena parte del sueldo es el pago de la vivienda. El Estado del Bienestar facilitó el endeudamiento de muchas familias que pudieron comprar su vivienda, su coche, poner un pequeño negocio… Hasta que explotó la burbuja inmobiliaria: muchas empresas quebraron y dejaron edificios a medio construir, adultos sin trabajo, jóvenes desmotivados…En la generación actual se dice que no pueden emanciparse, que no pueden alquilar ni mucho menos comprar un piso. Muchos están desmotivados y siguen viviendo con sus padres boomers, a los que critican porque no son modernos y tienen ideas antiguas como “esforzarse, aguantar, ahorrar, limpiar y ordenar”, objetivos de otros tiempos.
Esos jóvenes han visto año tras año cómo se iban reduciendo las exigencias en los
estudios, para que lo que se les pide se ajuste a lo que pueden dar. Pides menos, dan
menos. Al año siguiente, repetimos desde ese punto. Hasta el caso de que personas con 16 años se gradúan sin saber redactar, con una letra ilegible, con graves problemas de
comprensión lectora, sin saber ajustar las cuentas de la compra diaria… Pero son los
tiempos que corren. Dicen que no es moderno, que pedir eso está anticuado y desmotiva a los jóvenes.
Aunque eso de los jóvenes desmotivados no me cuadra mucho. Durante la expansión del ladrillo, muchos jóvenes abandonaban los estudios para trabajar en la obra y ganar un dineral. Cierto y probado. Alumnos de 16 años ganaban en un mes como paletas más que un profesor de secundaria. Pero ahora dicen que los jóvenes abandonan hoy los estudios porque no están motivados, porque no encontrarán trabajo cuando se gradúen.
¿Recordáis que hace unos años quisieron utilizar el gancho de sacarse el carnet de
conducir para que se graduaran? No se llevó a la práctica. Donde yo vivo antes de poner el pie en la calle tenemos que mirar de manera panorámica porque nos puede aparecer un coche marcha atrás y en dirección contraria, o de frente a toda velocidad, subiendo la cuesta que es de bajada. Ya ponen la señales de dirección prohibida a pares, pero a ellos no les significa nada. Por otra parte, tampoco le significa nada a tráfico la proliferación de patinetes eléctricos en esta generación. Están prohibiendo y multando por control fotográfico a automóviles matriculados por ir más allá de los 30km/h, pero los patinetes eléctricos conducidos a 25 km/h, sin matrícula, sin casco y sin reflectantes proliferan de día y de noche por todas partes, aumentando el número de víctimas de la carretera. Se está perdiendo el instinto de supervivencia o simplemente se trata de que no piensan en las consecuencias? En contra de los que defienden que se está cambiando las ciudades para el confort y la salud de sus habitantes, se alzan protestas por la proliferación de obstáculos y calles cortadas, por la efervescencia de patinetes, motos y bicicletas por la izquierda y la derecha, por la calzada y por la acera.
En las últimas décadas se ha alargado mucho la edad de emancipación de los jóvenes. Eso tiene como consecuencia un freno en diversos aspectos de la economía, ya que si no se independizan no ocuparan un nuevo domicilio ni compraran coches las dos industrias principales de la generación boomer, pero también un freno demográfico otro contrapeso al baby-boom.
La atención de mayores, enfermos y niños.
A quienes cuidamos, familiares o extraños? Otro gasto importante de la economía
doméstica es el servicio de cuidado de personas. A la entrada al trabajo veo tantos abuelos llevando los nietos de la mano!! A veces pienso, que estaría bien que al crecer esos niños cuidasen de sus abuelos cuando no se pueda valer. Pero el gran trasvase del campo a la ciudad de los sesenta también llevaba consigo la fractura de la tradición de cuidar del abuelo. De niña conocí a ancianos que cuidaban de ancianos parientes viviendo todos juntos en la misma casa. Nunca oí un comentario al respecto, como tampoco oí comentarios relacionados con la tía solterona y los hijos que también se cuidaban.
Ahora es diferente y estas personas mayores, después de toda la vida trabajando, llegan a la vejez, con achaques y necesidades económicas. La gran mayoría de personas mayores no pueden ser atendidas por sus familiares y necesitan ir a una residencia. El Estado del Bienestar también facilitó el aumento de éstas y el precio mensual se ha hecho más asequible. Cuentan con personal cualificado y entregado, aunque es duro trabajar cuidando ancianos y enfermos. Es muy arriesgado y no está bien pagado.
La sociedad envejecida de los países desarrollados
¿Quién nos va a cuidar cuando no podamos valernos? En este último punto me detengo, porque cada día falta menos para lo que parecía lejano y ajeno hace tiempo. De año en año vamos perdiendo agilidad, capacidades y aquello que les pasaba a otros va empezando a ser propio.
El primer año que Catalunya tuvo déficit demográfico fue el 1993. Hubo mucho revuelo. Les preocupaba cómo iban a pagar las pensiones, las nuestras, las del baby-boom, de los boomers, el gran aumento demográfico de los sesenta cuando llegara esta década de 2020.
Entonces se las ingeniaron para que entrara masivamente población extranjera. Hasta la crisis financiera mundial que empezó el 2007. El 2008 fue el primer año en que el saldo migratorio fue negativo. En el 2009 se publicó un libro con ese título “2020” que ya he leído dos veces y os recomiendo.
Nuestra sociedad envejece. Es vieja. Pero está construída, no es un descampado. La
hicieron, la hicimos y la deben seguir haciendo, cuando nosotros no estemos. No hay
excusas. Aquí llueve pocas veces. Pues ya ha llovido, desde que empezaron a decir que
nuestra sociedad envejecía, no les pilla descuidados. Y cuánto insisten en que los boomer somos una carga!! Si más bien somos bestias de carga, porque hemos trabajado como bestias y como tales hemos encajado muchos golpes. Devolvámosela cuando digan que somos una carga !!! Que no nos pille descuidados!!